Colombia
FUNDACIÓN ENTRE DOS TIERRAS
¿Quienes Somos?
La Fundación Entre Dos Tierras, nace en 2012, como un sentimiento espontáneo de solidaridad hacia los migrantes venezolanos. Posteriormente en AGOSTO DE 2017, se formaliza como Fundación, con todos los registros y matrículas pertinentes para su funcionamiento dentro la normativa legal y tributaria vigente en Colombia. Actualmente somos una Fundación sin ánimo de lucro, con certificación ESAL (Entidad sin ánimo de lucro), conformada por un equipo extraordinario de personas venezolanos y retornadas, comprometidas con el objetivo de dignificar y humanizar el proceso de desplazamiento migratorio venezolano, derivado de la crisis provocada por el Régimen en Venezuela.
Misión
Brindar asistencia y acompañamiento necesarios en los distintos ámbitos del desenvolvimiento de la vida humana y ciudadana, de los protagonistas de la crisis humanitaria: los desplazados venezolanos, con el fin de restaurar la dignidad y humanizar un proceso que ya en sí mismo es inhumano, realizando programas, actividades y esfuerzos enfocados en resolver las situaciones que padecen los migrantes provenientes de Venezuela. Suministrando asistencia en las necesidades básicas como alimentación, medicamentos, ropa, solución de problemas legales y migratorios, asistencia en carretera y capacitaciones hacer énfasis en la defensa de los derechos humanos y civiles de los migrantes, como población vulnerable y altamente expuesta. Concientizar a la población de acogida en la necesidad de solidaridad y tolerancia mientras la circunstancia es superada, con actividades culturales, gastronómicas y conversatorios. Disminuir los niveles de resistencia y rechazo usando la buena disposición de los medios de comunicación. Conservar la identidad cultural a través de actividades lúdicas, deportivas, artesanales y gastronómicas.
Visión
Consolidarnos como una Institución humanitaria de atención integral que apoya a las poblaciones vulnerables desplazadas. Promover la formación, capacitación y empoderamiento positivo de las poblaciones desplazadas, transformando la percepción de “problema” en oportunidad de crecimiento e integración. Promover y afianzar la responsabilidad social y solidaridad como pilar de convivencia y tolerancia. Superar esta crisis humanitaria con el mayor grado de compromiso e identidad; transmitiendo valores, recuperando una parte de la dignidad humana, e incluso entregando alegría y esperanza a una población altamente vulnerable y deprimida, disminuyendo su estado de necesidad, confusión y dispersión.
